España quiere que compremos coches eléctricos que se fabrican aquí. Y acaba de liberar otros 400 millones de euros para ello – El diario andino

2035. Esa es la fecha que Europa tiene marcada en el calendario como el fin de la venta de vehículos nuevos de gasolina y diésel. Pese a las voces en contra, la UE considera que eliminar de la ecuación los coches de combustión y reducir las emisiones de los vendidos hasta entonces es el camino para alcanzar los objetivos de descarbonización. España tiene que sumarse a esta iniciativa y, para ello, acaba de sumar 400 millones de euros más al proyecto PERTE VEC.

Porque el futuro de la movilidad parece ser eléctrico… o no lo será.

PERTE VEC. El Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica del Vehículo Eléctrico y Conectado, o PERTE VECes un iniciativa que fue aprobado en julio de 2021 con el objetivo de crear un ecosistema español favorable para el desarrollo y fabricación de vehículos eléctricos.

Es un programa que prevé una inversión total de más de 24.000 millones de euros con una aportación pública de más de 4.000 millones y, el resto, inversión privada. Y el objetivo es ese: ayudar a las empresas a ver España como un ecosistema interesante para llevar a cabo el proceso de desarrollo y fabricación de vehículos. Esto incluye la producción, pero también la innovación y la investigación en componentes, baterías y otras tecnologías asociadas al vehículo eléctrico.

400 millones más. Con este objetivo de facilitar la transición verde del parque automovilístico, el Ministerio de Industria y Turismo recién lanzado la cuarta convocatoria del PERTE VEC. En total, 400 millones de euros más para dar valor a esta cadena productiva, que se dividen en:

• 250 millones de euros como préstamos reembolsables a una interés fijo del 2,8% y un plazo de 10 años.
• 150 millones de euros en subvenciones directas.

Nueva convocatoria. Las empresas que lo deseen tienen desde el 14 de octubre de 2025 hasta el 24 de octubre para registrarse. Estos 400 millones son una fracción del total del PERTE VEC IV, que cuenta con un presupuesto de 1.250 millones de euros que se irán liberando en sucesivas fases. Y no, no es un programa como MOVES III, que atañe directamente al consumidor: PERTE VEC está enfocado a las empresas.

Una limitación es que no pueden ser empresas del sector público y deben tener capacidad demostrada para llevar a cabo sus proyectos. Cumpliendo con esto, los beneficiarios podrán ser todas aquellas empresas con personalidad jurídica propia en nuestro país que realicen actividades relacionadas con el desarrollo de vehículos eléctricos. Esto implica que no tienen por qué ser las grandes marcas, sino también empresas que fabrican baterías, componentes eléctricos, sistemas de carga o incluso aquellas que desarrollan software.

Marcas chinas incluidas.. Siempre que cumplan los requisitos, las empresas chinas también pueden beneficiarse de ello. El gigante asiático vio antes que muchos la importancia de la transición hacia los vehículos eléctricos como forma de apoyar la consecución de los objetivos de descarbonización y, de hecho, esta ambición europea es algo de lo que asistimos desde hace meses.

El objetivo de medidas como esta es, precisamente, que se establezcan cadenas de valor en nuestro territorio y que las empresas no se limiten a traer sus coches en grandes barcos desde China o simplemente ensamblarlos en Europa, sino a fabricarlos aquí. Y un ejemplo de que las empresas chinas son bienvenidas fue la invitación formal del Ministerio de Industria a la empresa Chery para que presente su solicitud ante el PERTE VEC.

Imagen | stellantis

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